martes, 16 de marzo de 2010

Artículo en cincodias.com: El complejo día después de los fármacos "bio"

Fuente: http://journalmex.files.wordpress.com/2009/08/medicamentos4.jpg

Reproducimos íntegramente este interesante artículo:

Acceder al artículo: http://www.cincodias.com/articulo/Ciencia-Salud/complejo-dia-despues-farmacos-bio/20100311cdscys_6/cdssupcys/?goback=%2Envr_118876_1

Las terapias biotecnológicas tienen más efectos secundarios y más graves que los medicamentos tradicionales

Los médicos han tenido que extremar el cuidado de sus pacientes


Paloma G. Moreno - Madrid - 11/03/2010

Los medicamentos son eso, medicamentos. Y guste o no, por milagrosos que parezcan, absolutamente todos tienen pegas. Una de las más graves, al margen de su ineficacia en algunos casos, son los efectos adversos, y de esta quema no se salvan ni los tan enaltecidos medicamentos biotecnológicos.

Pese a que desde su irrupción en la medicina los biológicos gozan del beneplácito de la mayoría de los profesionales médicos, dada su mayor eficacia, estos tratamientos también están lastrados por este inconveniente. Incluso más, según señalan algunos profesionales de la sanidad.

Loreto Carmona, directora de la Unidad de Investigación de la Sociedad Española de Reumatología, es muy taxativa. Los biológicos "no son más seguros que los tradicionales y además son mucho más caros. Por eso, en muchos casos se usan cuando los tradicionales no funcionan", al menos en el ámbito de enfermedades reumáticas, apunta.

Trastornos vasculares, trombosis, alteraciones de la tiroides, infecciones respiratorias, neumonías, tuberculosis, epiteliomas (tumores en la piel), disminución de las defensas, toxicidad ocular e incluso reacciones alérgicas, diarrea o rash en la piel son sólo algunos de los efectos adversos que se han empezado a constatar desde que comenzaron a aplicarse estos tratamientos, muchos de ellos con apenas sólo tres o cuatro años de existencia. Parece ser que el medicamento perfecto, al menos de momento, no existe.

Cesar Hernández, subdirector de medicamentos de uso humano de la entidad encargada de la seguridad en España, la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, también es muy expeditivo. "Los biotecnológicos no son placebos. Son potencialmente peligrosos". La garantía está en utilizarlos correctamente, controlando sus riesgos. Precisamente, extremar el control de estos riesgos es lo que está acarreando cambios importantes incluso en la práctica médica. Para empezar, "los profesionales no han tenido más remedio que volcarse más en el cuidado y vigilancia de los pacientes; algo muy positivo", asevera Carmona.

Y es que es en el médico en quien recae la responsabilidad de conocer cómo se metabolizan estos medicamentos, cómo se manejan y los efectos que producen al combinarse con otros fármacos, asegura Emilio Alba, presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, área donde los oncólogos han tenido que empezar a bregar con nuevos efectos secundarios, como trombosis, alteraciones de la tiroides o reacciones infusionales, derivados de los biológicos. Y todos son más frecuentes que en la demonizada quimioterapia.

En el área de las enfermedades reumatológicas también han tenido que cambiar el chip desde que empezaron a utilizar estos tratamientos. "No se sabía qué cosas nuevas podrían traer", asegura Carmona. Además de la disminución de las defensas, propio de estos fármacos, cuyo coste anual en el tratamiento de la enfermedad auto inmune artritis reumatoide puede costar unos 23.000 euros, los médicos tuvieron que hacer frente a nuevas manifestaciones. Infecciones de vías respiratorias altas, neumonías, así como con una reactivación de la tuberculosis en los pacientes o tumores en la piel.

Otro de los cambios que ha traído la proliferación de estos tratamientos ha sido el nacimiento de nuevos registros, encargados de recoger cualquier incidencia generada. Inscripción que, según ha señalado Hernández, viene a reforzar la ya intensa labor de farmacovigilancia que lleva a cabo la Agencia del Medicamento. Paralelamente a la supervisión que realizan las comunidades autónomas, mediante las comunicaciones hechas por los facultativos y los pacientes, estos registros tienen la particularidad de tener un carácter más obligatorio.

Financiados por los laboratorios, aunque al principio con ciertas reservas (en Europa el 80% de las notificaciones de efectos secundarios vienen de la industria mientras que en España sólo el 20%), gracias a estos registros se ha conseguido, que algunos medicamentos autorizados a priori, de acuerdo a una relación beneficio/riesgo, fueran retirados del mercado tras comprobar que esta relación quedaba alterada en un uso más masivo. Como señala Hernández, la vigilancia continúa después del ensayo clínico.

Registro, nueva arma de control

El Registro español de Acontecimientos Adversos de Terapias Biológicas en Enfermedades Reumatoides (Biobadaser) y el Biobadaderm, Registro de Acontecimientos Adversos en Dermatología, son dos de los registros que se han montado en España recientemente (siguiendo la tendencia europea), para recoger las contraindicaciones arrojadas por los tratamientos biológicos, impulsados por sociedades médicas y financiados por la industria farmacéutica. Sólo en el primero, que nació en el año 2000, se han recogido 950 efectos adversos entre 10.000 pacientes que actualmente están tratados con fármacos biotecnológicos. Por su parte, el registro Biobadaderm, promovido por el Grupo Español de Psoriasis, la Academia Española de Dermatología y Venereología, en colaboración con la Agencia Española del Medicamento, y puesto en marcha en 2008, todavía está más incipiente. Según ha señalado Francisco Vanaclocha, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, habrá que esperar a que finalice este año para mostrar los datos sobre las incidencias en esta área.

Ahora el objetivo está en el campo de la oncología. Un capítulo bastante más difícil de acotar, dada la gran cantidad de patologías, tumores y nacimiento de nuevos fármacos. Así y todo, la Agencia del Medicamento está teniendo conversaciones con la comunidad científica para dar luz verde a este proyecto.

Lo que hay que saber

Trombosis, epiteliomas, infecciones respiratorias o reactivación de la tuberculosis son sólo algunas de las contraindicaciones que lacran los bio si no se manejan adecuadamente.
El alto coste de estas terapias implica un control en su uso masivo, avalado por la relación beneficio/riesgo.

lunes, 15 de marzo de 2010

"EL CASO DE LA PANDEMIA DE LA GRIPE A Y EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA INFORMACIÓN EN SALUD"





La ciudadanía está muy viva gracias a Internet y a pensadores activos que aportan información, contrastación, puntos de vista diferentes y conocimiento.

El Caso de la Pandemia de la Gripe A supone un gran avance hacia el cambio del actual escenario de salud, anclado todavía en paternalismos que miran más por mantener el estatus quo, que por el bien, presente y futuro, del ciudadano en salud. "En nuestra opinión, la clave jurídica del caso de la gripe A está en la violación sistemática del derecho fundamental del ciudadano a la información en salud".(Manuel Amarilla y Francisco Almodóvar, abogados de Bufete RAM).

Bufete RAM les presenta un trabajo de investigación elaborado por los abogados Manuel Amarilla y Francisco Almodóvar, donde exponen la teoría del derecho del ciudadano a la información en salud y su importancia a la hora de exigir responsabilidades legales por la creación, gestión y desarrollo de esta pandemia.

Título del documento: El Derecho Fundamental del Ciudadano a la Información en Salud y la Pandemia de la gripe A.



Acceso al documento: http://bufeteram.com/teoria_investigacion.htm